Un supermercado de la localidad de El Bolsón cerró sus puertas de un día para el otro, dejando a sus empleados sin respuestas y desatando una investigación judicial. La sorpresa fue total cuando los trabajadores recibieron telegramas laborales en los que la patronal se limitó a informar que el comercio “se mudó”.
La condena judicial
La Cámara Primera del Trabajo de Bariloche resolvió condenar a Wang Zhuzhu, responsable de la explotación original del supermercado, al pago de:
- indemnizaciones por despido incausado,
- salarios adeudados,
- vacaciones,
- aguinaldo,
- y multas previstas en la Ley 25.323.
El fallo –que aún no está firme– determinó que el empresario incurrió en maniobras evasivas y abusos laborales que configuraron una injuria grave hacia los trabajadores.
Irregularidades comprobadas
La investigación judicial confirmó que:
- Dos trabajadoras estaban deficientemente registradas.
- Otro empleado ni siquiera había sido inscripto.
- Las jornadas laborales superaban las nueve horas diarias.
- Se trabajaba los domingos y feriados sin la remuneración correspondiente.
El cierre inesperado
Los empleados recordaron que la patronal había comunicado un receso general de vacaciones. Sin embargo, al regresar se encontraron con un escenario totalmente distinto:
- Un nuevo gerenciamiento en el local que les negó el ingreso.
- La desaparición del dueño anterior, que dejó a los trabajadores en el aire.
El fallo expone un caso de fraude laboral y desprotección de los empleados, y marca un precedente en la región frente a prácticas empresariales abusivas.
Desarrollado por La Mega 98.9 SG —
