Estos juegos fueron instalados con el esfuerzo de muchas personas y pensados para que toda la comunidad, especialmente quienes utilizan sillas de ruedas, puedan disfrutar de un lugar accesible y seguro.
Agradecemos profundamente a los vecinos que no dudaron en colaborar y ayudar a resguardar el juego. Su compromiso demuestra que el cuidado de los espacios públicos es una tarea colectiva.
Cuidar lo que es de todos es también construir una comunidad más unida y responsable.

