La construcción del Oleoducto Vaca Muerta Sur ya alcanzó un tercio de su desarrollo. La obra, que unirá Allen con el puerto de Punta Colorada en Río Negro, permitirá transportar hasta 700.000 barriles de petróleo diarios y se espera que esté operativa a fines de 2026.
El avance de una obra estratégica
Desde el inicio de los trabajos en el primer cuatrimestre de este año, la empresa VMOS, integrada por las principales petroleras que operan en la formación neuquina, confirmó que los avances ya cubren un tercio del total de la obra.
El objetivo es claro: mejorar la capacidad de evacuación del crudo de Vaca Muerta hacia la costa atlántica, incrementando en un 70% el transporte actual.
Los cuatro bloques de trabajo
La obra se divide en cuatro grandes bloques que muestran el ritmo del proyecto:
- Tendido de los ductos
El tramo más visible es la soldadura y colocación de caños de 30 pulgadas entre Allen y Punta Colorada. Actualmente los trabajos se concentran en la zona de Aguada Cecilio, sobre la Ruta Nacional 23, donde funciona un campamento de la UTE Sacde-Techint. - Cabecera de bombeo en Allen
Construida por la empresa AESA, está ubicada al norte de Allen y Roca, cerca de la planta de Oldelval. Allí se levantan tres tanques de 55.000 m³ que funcionarán como un gran nodo de distribución, conectando con Bahía Rosales o con Punta Colorada según la demanda. - Estaciones intermedias de bombeo
La primera estación ya se construye en Chelforó, a cargo de la firma OPS. En total serán tres estaciones a lo largo del ducto, con capacidad para impulsar unos 390.000 barriles diarios hacia el Atlántico. - Puerto en Punta Colorada
El final del recorrido será una terminal portuaria de gran escala en la zona atlántica, con instalaciones onshore para almacenar y cargar buques a 8 km de la costa.
Impacto y proyección
Cuando esté en pleno funcionamiento, hacia fines de 2026, el Oleoducto Vaca Muerta Sur transportará hasta 700.000 barriles diarios, consolidando a la formación neuquina como un eje estratégico para la exportación de petróleo.
Además de fortalecer la infraestructura energética, la obra genera empleo en distintas localidades de Río Negro y promete convertir a Punta Colorada en un punto clave para la salida de crudo al mundo.
Conclusión
El avance de un tercio del Oleoducto Vaca Muerta Sur marca un hito en la infraestructura energética argentina. Con cuatro bloques de trabajo en marcha y una inversión de escala inédita, la obra apunta a garantizar salida al crudo de Vaca Muerta y abrir la puerta a un nuevo ciclo exportador para el país.
